El vino tinto puede ser bueno para tu salud y tus intestinos... si lo tomas con moderación.
Un grupo de investigadores del Kings College de Londres, Reino Unido, confirmó que esta bebida aumenta el número de ciertas bacterias que ayudan a los intestinos.
Los beneficios están asociados a los polifenoles, una sustancia química que se encuentra en las uvas rojas. Por eso están en mayor cantidad en el vino tinto que en el blanco, la cerveza o la sidra.
Un vaso de vino tinto cada dos semanas debería ser suficiente para apreciar la diferencia, aunque los investigadores dicen que estos componentes no son exclusivos de las bebidas alcohólicas.
Los polifenoles se encuentran también en muchas frutas y verduras -como las lentejas, las judías, los guisantes, la soja o el tomate- pero los que son del mismo tipo quee las uvas rojas están en las fresas, las frambuesas o los arándanos.