Joshua Carroll decidió que, en lugar de seguir una educación universitaria, se enlistaría en el ejército Ni siquiera quiso acabar la secundaria. Carroll obtuvo su GED para poder alistarse en el ejército.
Después de estar destinado en Irak, Carroll regresó a su casa en Virginia. Sufría de síndrome post traumático y una falta general de propósito vital.
Carroll había comenzado a trabajar como conserje en una escuela local cuando vio un libro de Stephen Hawking en el estante de una biblioteca. Mientras pasaba las páginas, Carroll de repente decidió perseguir el sueño de su infancia: siempre quiso ser físico.
Carroll logró persuadir a los empleados de admisiones de la Universidad de Radford para que le dejaran cumplir los requisitos previos para el programa de física, siempre que pudiera demostrar que sabía trigonometría.
Armado con nada más que internet, Carroll se preparó para su examen de ingreso viendo docenas de videos de YouTube para aprender matemáticas avanzadas en solo tres semanas.
No solo pasó con gran éxito, sino que se graduó como uno de los mejores estudiantes de su clase, y ha estado trabajando como físico desde entonces.
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