Como cada fin de semana, Xander de 12 años
se levantó a primera hora de la mañana y fue con su padre a la cochera para seguir trabajando en el proyecto ambicioso que ambos empezaron tiempo atrás: construir su propio Lamborghini Aventador SV, a base de impresiones 3D.
Sin embargo, cuando abrieron la puerta, el niño se quedó sin palabras al encontrar un Lamborghini de verdad.
La historia empezó por un videojuego de carreras, en el que Xander siempre escogía el superdeportivo de la marca italiana. Un día se le ocurrió una idea y se la propuso a su padre, Sterling Backus: construir su propio coche a escala real. Pese al escepticismo del resto de la familia, padre e hijo iniciaron el proyecto en el garaje de su casa, ubicada en Erie, Colorado, Estados Unidos.
Primero diseñó los paneles por separado en Solidworks, un programa de diseño 3D, y luego los imprimió uno a uno. Los paneles fueron recubiertos en fibra de carbono, pegados entre sí y sellados al vacío.
El “carro” estaría basado en piezas de segundo uso del Aventador original y en su lugar utilizaría piezas de otros, como las de un Porsche 911. El motor tampoco iba ser el de un Lamborghini Aventador, sino el de un Chevrolet Corvette del 2003.
Dos años después, el carro parecía ir tomando más forma, pero aún lucía muy lejos el resultado final. Sin embargo, la prestigiosa marca de Sant’Agata Bolognese, se enteró de la historia y decidió recompensar la fidelidad de Xander y su padre con una gran sorpresa.
Unos días antes de las fechas navideñas, durante la madrugada, Lamborghini reemplazó la réplica que estaban construyendo por un ejemplar original.
Un Lamborghini Aventador SV oficial cuesta unos USD 420.000. Con una velocidad punta de 350 km/h, el roadster puede desplazar la aguja del velocímetro de cero a cien en unos 3 segundos
La compañía señaló en un comunicado que “Automobili Lamborghini está en contra de cualquier intento de falsificación. Sin embargo, una historia de pasión verdadera merece ser conocida, por lo que elegimos contarles sobre el proyecto de Sterling y Xander en nuestro video de Navidad 2019”, explicó Katia Bassi, jefa de Mercadotecnia y Comunicación de la empresa.
Es importante aclarar que la compañía no les regaló el bólido, en realidad se los prestó por un tiempo para que pudieran experimentar en carne propia la velocidad y el sonido de su poderoso motor.
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