El mercado automotriz dominicano está inmerso en una transformación como consecuencia de la llegada de los vehículos eléctricos. Este hecho va de la mano con la transición energética en la que se encuentra el mundo para contrarrestar la dependencia de los combustibles derivados de petróleo.
Sin embargo, ante una inserción masiva de vehículos eléctricos en las redes del Distrito Nacional se producirían efectos radicales en cuanto a pérdidas técnicas, caída de tensión e intensidad de corriente en el alimentador de la red y la demanda individual del circuito.
Así lo determinó el estudio “Potencial impacto energético de los vehículos eléctricos en la red de distribución del Distrito Nacional, República Dominicana”, que fue publicado en la revista “Ciencia, Ingenierías y Aplicaciones” del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), y que estuvo a cargo de los docentes del Área de Ingenierías Miguel Aybar y Elvin Jiménez, junto a los estudiantes de término de la carrera de Ingeniería Eléctrica, Edison Álvarez, Henry Caraballo, Robinson Gómez, Manny Montero e Israel Soto.
“La demanda máxima que se tendría en los transformadores de potencia provocaría que estos trabajaran muy cerca de su potencia nominal, y en otros casos, la demanda superaría la capacidad del transformador”, afirma el estudio.
La investigación refiere que la infraestructura de la red de distribución del Distrito Nacional no se encuentra en la capacidad de abastecer la demanda producida por los vehículos eléctricos, y conforme aumente su penetración también lo harán las pérdidas económicas, debido a las tarifas actuales en relación al precio promedio definido por la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
Los circuitos evaluados en esta investigación pertenecen a la Distribuidora de Electricidad del Sur (EDESUR), tomados por el acceso a la información y la plataforma de simulación, la cual permitió desarrollar los escenarios de flujos de carga de los vehículos en sus redes de distribución concesionadas.
De acuerdo a estadísticas de la Dirección General de Aduanas para el 2017 ingresaron al país 28 vehículos eléctricos, y para el 2018, otros 39.
Recomendaciones
El estudio determinó que EDESUR debe iniciar los procesos de readecuación y actualización de las redes eléctricas de distribución, con vistas al proceso de transmisión energética en la movilidad eléctrica que está comenzando a desarrollar, debido a que varios factores son afectadas considerablemente por la inserción de los vehículos eléctricos de la matriz de transporte de la República Dominicana.
Entre los factores está la demanda máxima en los transformadores de potencia en distribución, la caída de tensión en los nodos del sistema, las pérdidas técnicas y la intensidad de corriente que circula por los alimentadores de los circuitos.
“Desde el punto de vista económico y considerando las condiciones actuales de las redes de distribución, las pérdidas financieras de las empresas distribuidoras de electricidad incrementarían a medida que aumenta la demanda de vehículos eléctricos, esto provoca que el negocio de distribución sea menos rentable y demanda una reconstrucción que disminuyan las pérdidas técnicas asociadas”, establece el estudio.
Alternativa limpia
Pese a esto, en la actualidad algunas entidades de intermediación financiera dominicana han apostado por brindarles a sus clientes energía limpia para cargar sus vehículos, con la instalación de estaciones de carga fotovoltaicas.